Día Mundial del Teatro (27.03.2013)
El Día Mundial del Teatro, creado el 1961 por el Instituto Internacional del Teatro (ITI) y la UNESCO, se celebra, cada año, el 27 de marzo. Este día se organizan, por todo el planeta, miles de actos teatrales que acostumbran a incluir la lectura de un mensaje que, tradicionalmente, redacta alguna personalidad del mundo del teatro a propuesta del ITI. Este año 2013, Dario Fo.
MENSAJE DEL DÍA MUNDIAL DEL TEATRO
27 de Marzo 2013
International Theatre Institute ITI -‐ World Organization for the Performing
Arts
Hace mucho tiempo, el poder tomó una decisión intolerante contra los comediantes
al expulsarlos del país.
Actualmente, los actores y las compañías teatrales tienen dificultades para
encontrar escenarios públicos, teatros y espectadores, todo a causa de la crisis.
Los dirigentes, por tanto, ya no están preocupados por controlar a aquellos
que les citan con ironía y sarcasmo, ya que no hay sitio para los actores, ni hay
un público al que dirigirse.
Por el contrario, durante el Renacimiento, en Italia, los que gobernaban,
tuvieron que hacer un esfuerzo importante para mantener a raya a los Comediantes,
pues reunían abundante público.
Se sabe que el gran éxodo de actores
de Commedia dell'Arte tuvo lugar en el siglo de la Contrarreforma, que decretó el
desmantelamiento de todos los espacios teatrales, especialmente en Roma, donde fueron
acusados de ofender a la ciudad santa.
En 1697, el Papa Inocente XII, bajo la presión de insistentes requerimientos
del ala más conservadora de la burguesía y de los máximos exponentes del clero,
ordenó la eliminación del Teatro Tordinona que, según los moralistas, había acogido
el mayor número de representaciones obscenas.
En la época de la Contrarreforma, el cardenal Carlos Borromeo, que estuvo
activo en el norte de Italia, se consagró a la redención de los 'niños milaneses',
estableciendo una clara distinción entre el arte, como la máxima expresión de educación
espiritual, y el teatro, la manifestación de lo profano y lo vanidoso. En una carta
dirigida a sus colaboradores, que cito de memoria, se expresa más o menos así: "Los
que estamos resueltos a erradicar las malas hierbas, hemos hecho lo posible por
quemar textos que contienen discursos infames, para extirparlos de la memoria de
los hombres, y al mismo tiempo perseguir a todos aquellos que divulgan esos textos
impresos. Evidentemente, sin embargo, mientras dormíamos, el diablo maquinó con
renovada astucia. ¡Hasta qué punto es más penetrante en el alma lo que los ojos
pueden ver que lo que puedan leer de los libros de ese género! ¡Hasta qué punto
más devastadora para las mentes de los adolescentes y niños es la palabra hablada
y el gesto apropiado, que una palabra muerta impresa en un libro. Por tanto es urgente
sacar a las gentes de teatro de nuestras ciudades, como lo hacemos con las almas
indeseables."
Por tanto, la única solución a la crisis se basa en la esperanza de que se
organice una gran caza de brujas contra nosotros y especialmente contra la gente
joven que desea aprender el arte del teatro: Una nueva diáspora de Comediantes que,
desde tal imposición, sin lugar a dudas provocará beneficios inimaginables por el
bien de una nueva representación.
Dario Fo
Traducción de Fernando Bercebal